Si no se ha podido evitar la producción de residuos peligrosos, lo que queda por hacer es cosa nuestra, evitar problemas depende mucho de nuestra capacidad de gestionarlos, por lo que te presentamos los pasos, atentos.
Residuos peligrosos, fases de una correcta gestión.
Para llevar a cabo un correcto almacenamiento temporal de los residuos peligrosos de la empresa es muy recomendable contar con el asesoramiento de una empresa especializada en el sector, la cual os facilitara el gestor mas adecuado para esa gestión, contando desde ese momento con un contrato de tratamiento, para justificar ante posibles inspecciones cual será la gestión que se va a llevar a cabo.
No obstante, vamos a ver algunos algunos aspectos básicos importantes a tener en cuenta para identificar y almacenar correctamente los residuos peligrosos hasta el momento en que el gestor autorizado de residuos se haga cargo de ellos.
¿Cómo podemos identificar los residuos peligrosos?
Mediante la Lista Europea de Residuos (LER) especificada en la Decisión 2014/955/UE. los residuos peligrosos incluidos en ella están marcados con un asterisco (*). Por otra parte, la ficha de datos de seguridad debe incluir información sobre su peligrosidad.
¿Qué características convierten a un residuo en peligroso?
Un residuo se clasifica como peligroso si presenta una o varias de estas características de peligrosidad:
- HP 1 Explosivo: residuos que, por reacción química, pueden desprender gases a una temperatura, presión y velocidad tales que pueden ocasionar daños a su entorno.
- HP 2 Comburente: residuos que, generalmente liberando oxígeno, pueden provocar o facilitar la combustión de otras sustancias.
- HP 3 Inflamable: residuos, liquidos, sólidos o gases que pueden inflamarse o provocar fuego fácilmente a bajas temperaturas, por fricción , en contacto con el aire, etc.
- HP 4 Irritante: residuos que, cuando se aplican, pueden provocar irritaciones cutáneas o lesiones oculares
- HP 5 Toxicidad específica en determinados órganos (STOT)/Toxicidad por aspiración: residuos que pueden provocar una toxicidad específica en determinados órganos, bien por una exposición única, bien por exposiciones repetidas, o que pueden provocar efectos tóxicos agudos por aspiración.
- HP 6 Toxicidad aguda: residuos que pueden provocar efectos tóxicos agudos tras la administración por vía oral o cutánea, o como consecuencia de una exposición por inhalación.
- HP 7 Carcinógeno: residuos que inducen cáncer o aumentan su incidencia
- HP 8 Corrosivo: residuos que, cuando se aplican, pueden provocar corrosión cutánea.
- HP 9 Infeccioso: residuos que contienen microorganismos viables, o sus toxinas, de los que se sabe o existen razones fundadas para creer que causan enfermedades en el ser humano o en otros organismos vivos
- HP 10 Tóxico para la reproducción: residuos que tienen efectos adversos sobre la función sexual y la fertilidad de hombres y mujeres adultos, así como sobre el desarrollo de los descendientes.
- HP 11 Mutagénico: residuos que pueden provocar una mutación, es decir, un cambio permanente en la cantidad o en la estructura del material genético de una célula.
- HP 12 Liberación de un gas de toxicidad aguda: residuos que emiten gases de toxicidad aguda (Acute Tox. 1, 2 ó 3) en contacto con agua o con un ácido.
- HP 13 Sensibilizante: residuos que contienen una o varias sustancias que se sabe tienen efectos sensibilizantes para la piel o los órganos respiratorios.
- HP 14 Ecotóxico: residuos que presentan o pueden presentar riesgos inmediatos o diferidos para uno o más compartimentos del medio ambiente
- HP 15 Se puede caracterizar un residuo como peligroso basándose en otros criterios aplicables, tales como la evaluación del lixiviado
¿Cómo almaceno los residuos peligrosos?
¿Dónde almacenarlos? Se debe disponer de una zona habilitada y claramente identificada para este tipo de residuos, a la que sólo puedan acceder las personas autorizadas y capacitadas para la manipulación y el almacenamiento de residuos peligrosos. Hay que evitar que los residuos peligrosos almacenados tengan contacto con la lluvia, el viento u otros agentes externos, por lo que es mejor almacenarlos en espacios cubiertos pero bien ventilados, de forma natural o artificial, y con una temperatura constante, que no se te olvide darte de alta como pequeño productor, detalle importante. 🙂
También es recomendable utilizar sistemas de retención en las zonas de almacenamiento y de carga/descarga de los residuos, que eviten la contaminación provocada por derrames accidentales.
Una vez organizados por categorías, los residuos peligrosos deben envasarse de forma correcta para almacenarlos. Los contenedores deben estar preparados para evitar incompatibilidades con los residuos, que no den lugar a mezclas peligrosas, que sean resistentes para su manipulación, con cierres sólidos y resistentes y se debe adaptar su volumen a la cantidad y frecuencia de generación de los residuos peligrosos. Los recipientes o envases que contengan residuos peligrosos deberán estar señalizados y etiquetados de forma clara y visible, legible e indeleble, recogiendo las principales características de cada residuo.
Está prohibido mezclar o diluir los residuos peligrosos con otras categorías de residuos peligrosos o con otros residuos, sustancias o materiales.
¿Cuánto tiempo podemos almacenarlos en la empresa?
La duración máxima permitida del almacenamiento de los residuos peligrosos en el lugar de producción es de seis meses, tanto si se destinan a valorización como a eliminación, según queda recogido en la ley 7/2022 de 8 de abril, en el articulo 21, “en el caso de residuos no peligrosos cuando el destino es valorización será inferior a 2 años y para eliminación será de 1 año”
En supuestos excepcionales, la autoridad competente de las comunidades autónomas donde se lleve a cabo dicho almacenamiento, por causas debidamente justificadas y siempre que se garantice la protección de la salud humana y el medio ambiente, podrá modificar este plazo, ampliándolo como máximo otros seis meses, en el caso de los residuos peligrosos.
Estos plazos empiezan a contar desde que se inicia el depósito de los residuos. Para ello es importante que se señale bien la ubicación de cada residuo y su fecha de almacenamiento.
Fuente: Miteco.